Dentro de las cárceles españolas la economía se maneja un tanto similar a la del resto del país. Se necesita dinero para obtener algunas cosas básicas, se pueden comprar artículos que estén en el exterior. Y quienes más dinero tienen, mayor facilidad tendrán para comprar. Pero hay ciertas interrogantes sobre este tema.
¿Cómo obtienen el dinero los presos en España? ¿Tienen algún límite las cuentas? ¿Qué leyes regulan el uso de dinero dentro de prisión? Veamos las respuestas a continuación.
¿Cómo Ingresar Dinero a un Preso en España por Internet?
El uso de internet se ha vuelto cada vez más frecuente. Gracias a él se pueden hacer infinidad de cosas, como comprar vender, enviar dinero a familiares y amigos y, en algunos países, hacer llegar dinero a los reclusos.
Claro, debes saber que en España la única manera de hacer esto vía internet, es a través de la página web del banco Santander. Sobre este método, transferencia bancaria, hablaremos más adelante en detalle. Las otras dos opciones para hacer llegar dinero a un recluso son las siguientes:
- Opción 1. Por correo. Se trata de un giro, dirigido al beneficiario. Es parecido a un cheque, el cual llega a la prisión y se deposita en la cuenta respectiva.
- Opción 2. Deposito en la taquilla. Tal y como se visita una entidad bancaria para hacer un depósito, también las cárceles tienen taquillas disponibles para esto.
Para cualquiera de las opciones es necesario contar con los datos del preso. Lógicamente, para evitar confusiones o errores, es necesario asegurarse de que toda la información sea exacta. En cada caso se debe colocar el número de cuenta, el nombre completo del recluso y, como lo indica la ley, es obligatoria la inclusión de la información de quien envía el dinero.
¿Cómo Ingresar Dinero a un Preso en España por Transferencia Bancaria?
El banco Santander ofrece el servicio de transferencia a cárceles del país. En prisión se asigna una cuenta a cada recluso, la cual estará asociada a una tarjeta, similar a la de débito. Solo puedes transferir a una de esas cuentas si eres familiar del preso. Estos son los pasos a seguir.
- Abrir página del banco. Debes tener cuenta en el banco Santander. Ingresa con tus datos como de costumbre.
- Sección de transferencias. Ubica esta sección y elige la opción de transferencia a terceros.
- Coloca los datos. Si aún no está registrada, debes agregarla. Se requiere su nombre completo y el número de cuenta. Esta información la puedes pedir en la prisión.
- Monto. La cantidad a transferir depende de ti y tu saldo. No tiene un límite.
- Confirmar. Luego, solo se necesita que confirmes la transacción, usando algún medio de seguridad del banco. Esto solo aplica si la cuenta no está registrada.
- Enviar dinero. Una vez hayas dado los pasos anteriores, solo debes enviar la transferencia.
El dinero enviado llegará a la cuenta principal del centro penitenciario. Desde allí los responsables se encargan de transferir a la cuenta del recluso. Se te cobrará una comisión por este servicio. Lo mismo ocurre con la opción de giro postal. Esta operación únicamente será gratis cuando se haga en la taquilla de la prisión.
¿Hay un Límite de Dinero para un Preso en España?
Si quieres saber si hay límite de dinero para un preso la respuesta es sí y no. Vamos a explicártelo mejor. La cantidad de dinero que puede disponer en su cuenta un recluso depende de sí mismo. Eso quiere decir que si tiene mucho dinero, esto puede ser depositado o transferido a su cuenta de prisión.
Con el saldo de esta cuenta puede realizar diferentes operaciones comerciales, como la obtención de artículos de su gusto, siempre y cuando no estén prohibidos dentro de la prisión. Entre los objetos más solicitados encontramos zapatos, ropa y similares.
Además, con esta cuenta es posible transferir desde la prisión a una cuenta de otro familiar. Por lo general, quienes hacen uso de este servicio son los presos que trabajan dentro de prisión.
Pero, la cantidad de dinero que puede manejar un preso dentro de la prisión tiene límite. No puede usar más de 100 euros cada semana. Esa cantidad se deposita en la tarjeta de cada recluso. Con ella se pueden conseguir artículos de primera necesidad dentro de la prisión, así como otros que el preso desee, como tabaco, bebidas u otras.
Como se trata de una tarjeta que depende del saldo de la cuenta principal, si la cuenta no tiene dinero, no se podrá recargar la tarjeta. Si el recluso prefiere disminuir su límite semanal, puede hacerlo.
¿Cuáles son las regulaciones económicas Para los Presos en España?
Como se trata de movimientos de dinero, hay ciertas regulaciones expresadas en la ley, conocida como Ley Orgánica General Penitenciaria. En esta se señalan dos puntos relacionados con el dinero.
En primer lugar, el dinero físico está prohibido dentro de la cárcel. Solo se permite el uso de este a través de la tarjeta antes mencionada. Por eso, si una persona tiene dinero en su poder al momento de ingresar a la prisión, este debe ser retenido antes de que el recluso entre en el centro penitenciario.
Esa cantidad se puede usar de distintas maneras. Por ejemplo, se puede enviar a una persona que el preso decida, se puede guardar para ser devuelto el día de su salida o, se puede depositar en su cuenta de prisión.
El segundo lugar, la Administración Penitenciaria es la encargada de controlar el dinero de las cuentas de prisión, conocidas como cuentas de peculio. Es a través de este organismo que se gestionan los ingresos de dinero, se asignan los montos en las tarjetas y, al momento de salir de prisión, se transfiere el dinero de la cuenta de la cárcel a otra cuenta, la cual será elegida por el ahora exrecluso.
Este organismo es el que regula las dos maneras de realizar operaciones comerciales. Una es lo que se conoce como economato. Se trata de la compra dentro de la cárcel de algunos artículos básicos. Este se efectúa con la tarjeta, la cual solo se puede recargar una vez a la semana.
La otra forma de comercio es la demandaduría. El único límite que tiene este servicio es el saldo de la cuenta del recluso. Luego de cumplir con los requisitos exigidos por la Administración Penitenciaria, el preso podrá comprar, a través de familiares o amigos, algunos artículos del exterior.
Si se siguen las reglas básicas de estos procedimientos, se puede sacar mucho provecho de esta provisión.